Repasando la prensa por internet, me he encontrado un artículo de Roberto Centeno,
catedrático de economía, en el que hace una feroz crítica a la gestión del gobierno de
Mariano Rajoy y nos pinta un panorama para echarse a temblar en el año 2013 que
acaba de empezar: más recesión, más paro y más deuda.
Este es el artículo
En el se nos advierte, entre otras cosas, que el porcentaje de población que vive por
debajo del umbral de la pobreza pasará del 25% al 35%.
Si todo lo que se nos avecina resulta ser cierto, el desastre social está servido, y todo
lo avanzado en los últimos veinte años por los españoles desaparecerá, sin que nadie
responda de los desmanes cometidos.
España es un país consumido por la voraz corrupción política, incapaz de rediseñar
un modelo socioeconómico racional y justo, incapaz de reducir el gasto innecesario
del aparato mastodóntico de las administraiones públicas.
Con seis millones de desempleados a la vista, pasarán años hasta que el nivel baje
a cotas razonables, aún en el caso de que se inicie más tarde que temprano alguna
reactivación de la economía.
De la burbuja inmobiliaria nos ha quedado el remanente de una inmigración que no
puede ser absorbida, con casi un 40% de los desempleados, constituyendo bolsas
que a su vez consumen cada vez más recursos públicos y deterioran las condiciones
laborales al abaratar los trabajos, como en el Levante, donde no quieren dar a los
nacionales trabajo en la recogida de la fruta al ser más barata y poco "problemática"
la mano de obra foránea.
Y para empeorarlo todo un poco más, bastante más diria, tenemos el problemón
de los nacionalistas secesionistas, que en la búsqueda de su tierra prometida están
socavando más las posibilidades de recuperación y futuro para todos.
En los momentos de crisis y necesidad, cada cual busca su propia salida, pero como
ya sucediera con los bávaros y su animadversión contra los prusianos en 1916 en
plena catástrofe de la Primera Guerra Mundial, la caida de unos, será la de todos.
España se precipita por la pendiente y al final de la misma, estarán los extremistas
de izquierdas y derechas esperando para traernos sus absurdas soluciones.
Salud Camaradas.